DESAFÍO
Diego González se defiende. Martín Antolínez lo reta.
Diego González oiréis lo que dijo:
«Tenemos sangre de los condes más limpios;
«en estos casamientos consentir no debimos,
«ni emparentar con mio Cid don Rodrigo!
«Por dejar a sus hijas no nos arrepentimos;
«mientras que vivan ya pueden hacer suspiros:
«vivirán deshonradas por lo que les hicimos.
«Esto mantendré ante el más atrevido:
«que porque las dejamos honra nos ha venido».
Martín Antolínez en pie se fue a levantar:
«Calla, traidor, boca sin verdad!
«Lo del león no se te debe olvidar;
«saliste por la puerta, te entraste en el corral,
«te fuiste a esconder tras la viga de un lagar;
«¡buenos quedaron tu manto y tu brial!
«Yo te mantendré que esta es la verdad:
«a las hijas del Cid las pudisteis dejar,
«pero por eso mismo en todo valen más.
«Al partir de la lid por tu boca lo dirás,
«que eres traidor y en todo mentido has».