Los cuentos son relatos que se transmiten oralmente.
Por ello, el narrador o narradora debía acompañar su relato con efectos especiales muy cercanos a la dramatización: cambios en la entonación, silencios, imitación de ruidos, gestos... Pero no sólo eso.
La transmisión oral origina que, al igual que en los romances o en la épica, se produzcan variaciones de forma en las versiones de un mismo relato, variaciones que, sin embargo, no afectan al contenido argumental ni a la estructura del mismo.