EL RAMAYANA
Esta es la más corta de la las dos grandes epopeyas de la India. La otra es el texto sánscrito del Mahabharata.
El Ramayana está protagonizado por el príncipe Rama, séptima encarnación del dios Vishnu. Se inicia contando su nacimiento, su educación y cómo gana la mano de Sita en matrimonio, disparando el gigantesco arco del dios Shiva.
Destituido como legítimo heredero al trono de su padre por las insidias de su madrastra Kekeyi, que quiere que el rey sea su hijo Bharata, Rama parte hacia el exilio acompañado de su esposa Sita y de su otro hermanastro Lakshmana. Tras una serie de episodios menores donde el héroe demuestra su valor y nobleza (Rama rechaza el trono que quiere devolverle su hermano Bharata, vive como anacoreta, vence a diversos demonios...), finalmente Sita es secuestrada con ardides por el rey demonio Ravana. La fechoría es presenciada por Sampati, el rey de los buitres, que no consigue salvar a la muchacha pero, moribundo, indica a Rama dónde encontrarla. Después de restaurar en el trono al legítimo rey de los monos, Rama, con la ayuda de su valiente hermano Lakshmana y de un ejército de simios comandado por el general mono Hanuman, acaba conquistando Lanká, el reino de los diablos. Mata a Ravana y rescata a Sita. Rama recupera su trono y su reina y gobierna sabiamente.
Aunque básicamente el Ramayana es un trabajo secular, incorpora muchos textos sagrados. Recitar el Ramayana se considera un acto religioso y la escenas de la epopeya se dramatizan a menudo en la India y parte de Asia.